En la mayoría de los talleres de coches de Málaga, una de las primeras cosas en las que nos fijamos al recibir un vehículo es en el humo que sale por su escape. El color y la cantidad de humo que sale puede ser un indicio para localizar el origen de una avería. El humo negro, por ejemplo, es una señal de que se está quemando un exceso de combustible. Al desmontar las bujías es probable que las encontremos con los electrodos negros de carbonilla. Hay que revisar el filtro del aire, la bomba de la gasolina por si estuviera dando una presión excesivamente alta y reglar adecuadamente el ralentí.

Los vehículos que llegan a nuestros talleres de coches en Málaga echando humo de color azulado por el tubo de escape nos están diciendo que ese motor está quemando aceite, y ese aceite tiene que pasar pistón en algún punto. Para resolver el problema, tenemos que revisar el estado de los aros del pistón, que puede que no ajusten con efectividad, los retenes de las válvulas que pueden haberse desgastado dejando de cumplir su función. Es necesario también comprobar que el aceite que usa el motor es de la densidad adecuada. Hay quien, por ahorrar, utiliza un aceite inadecuado en el coche.

Por último, el humo del escape puede ser de color blanco. Al arrancar, especialmente en tiempo frío, es normal que salgan unas bocanadas de humo blanco. Es el vapor de agua del interior del tubo de escape sale al calentarse éste, pero, si el humo no desaparece al cabo de unos minutos, ven rápidamente a Talleres M. Martínez G., S.C. pues, con toda seguridad, hay que acceder a la culata porque se ha roto la junta, o bien es la propia culata la que se ha agrietado.